HISTORIA


El equipo de barrio que dio origen al Atlético Nacional nació en 1935 en un potrero del barrio Buenos Aires al centro-oriente de Medellín con el nombre de Unión FC.[8] Fue fundado por un grupo de jóvenes que se reunían a jugar fútbol en el potrero conocido como 'la manga de Don Pepe'; ésta se encontraba en el costado oriental de la vía que en la actualidad es la Carrera 39, entre lo que hoy es el Teatro Pablo Tobón Uribe y la Placita de Flórez[8] . En 1936, el Unión se convierte en participante de la segunda categoría de la Liga Antioqueña de Fútbol; en ese entonces la liga contaba con 4 categorías: primera, segunda, tercera y juvenil. El equipo fue llevado a la segunda por don Miguel Ortiz Tobón, vicepresidente de la Liga, quien los había visto jugar y quedó impresionado por su calidad.

La primera vez que se escuchó hablar del Unión, que vestía camiseta de franela blanca y pantaloneta roja, fue en octubre de 1942 cuando ganó el campeonato aficionado de la segunda categoría de la Liga Antioqueña de Fútbol. Ya con un prestigio a cuestas, el Unión tenía listo su pase a la primera, pero para lograr que el ascenso fuera exitoso había que reforzar el equipo. En este momento entra el Indulana otro equipo aficionado. Ante la necesidad del Unión de no hacer el ridículo frente a Medellín y Huracán, los equipos más fuertes de la primera, se acordó la fusión del Unión y el Indulana. La fructífera alianza duro tres años, de 1943 a 1945.

Los principales partidos se jugaban en el campo de fútbol del hipódromo Los Libertadores, donde en la actualidad se ubica el barrio San Joaquín. Los juegos debían realizarse allí, debido a que la ciudad de Medellín no contaba con un estadio.


En 1947 Alberto Villegas Lopera, un ex presidente de la Liga Antioqueña de fútbol, lidera la fundación de una sociedad comercial destinada a estimular los deportes y establecer el fútbol y el baloncesto profesional en Antioquia. La sociedad inició labores con $50 mil pesos aportados por 500 socios en acciones de $100 pesos cada una, pagaderas en un primer contado de $20 pesos al momento de ingresar a la sociedad y los $80 restantes en un máximo de 12 cuotas mensuales. Así pues, el viernes 7 de marzo de 1947 se consolidó el nacimiento de la nueva institución bajo el nombre de Club Atlético Municipal de Medellín.

La escritura pública de la nueva sociedad se realizó el 30 de abril de 1947 en la notaría primera de Medellín. En el acta de constitución se indicó expresamente que uno de los objetivos de la nueva institución consistiría en “apoyar al deportista local y no solamente en fútbol sino en todos los deportes”.[11] De esta forma quedó plasmada claramente la filosofía ‘criollista’ del equipo verdolaga.

Debido a que la iniciativa no contaba con plantel de fútbol propio, se pensó en los equipos de la primera categoría de la Liga Antioqueña. El Unión FBC resultó ser el preciso y se acordó la incorporación de éste a la nueva institución. Dicha incorporación convirtió al Unión en el Atlético Municipal.[12]

Fundadores del equipo

Julio Ortiz
Jorge Osorio Cadavid
Jorge Gómez
Arturo Torres
Gilberto Molina
Alberto Eastman
Raúl Zapata Lotero
Luís Alberto Villegas Lopera

Por aquella misma época, el 27 de junio de 1948, es fundada en Barranquilla la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor), con el objetivo de organizar un torneo de fútbol profesional en el país. En aquella reunión asistió, como representante del Municipal, su presidente Jorge Osorio Cadavid. En la misma se planteó la creación del Fútbol Profesional Colombiano y se aprobó como fecha de iniciación del campeonato el 15 de agosto.[14]

El Atlético Municipal en medio de una polémica entre lo que se consideraba la comercialización del fútbol, por un lado, y sus raíces de amateurismo por el otro, abandona la Liga Antioqueña de fútbol, y se prepara para afrontar el campeonato profesional con una nomina de "puros criollos".[15] El domingo 15 de agosto a las once de la mañana juega su primer partido profesional, y el primer juego del profesionalismo en Colombia, contra la Universidad Nacional de Bogotá en el hipódromo-estadio San Fernando de Itaguí; marcador final, Atlético Municipal 2 Universidad Nacional 0. El primer gol del campeonato y del fútbol profesional colombiano, fue convertido por Rafael Serna de pena máxima a los 15 minutos del primer tiempo.

No obstante lo anterior, el Atlético Municipal no obtiene mayor figuración durante los primeros torneos del profesionalismo. Su política de ‘puros criollos’, lo sitúa en franca desventaja frente al resto de equipos que se habían reforzado con extranjeros de gran categoría. Era la época de “El Dorado” en la que llegaron a Colombia jugadores de toda América, entre ellos, varios que en aquel momento estaban entre los mejores del mundo.


En julio de 1950, Fabricato, una de las principales empresas de textiles de Medellín, se vincula al equipo al comprar la mayoría de sus acciones. Poco después, en agosto del mismo año el nombre del equipo es cambiado por el de Atlético Nacional. Esta decisión se tomó teniendo en cuenta que el equipo contaba con jugadores de todo el país y que ésta denominación seguía más de cerca el lema adoptado por la institución desde su fundación oficial, “Por encima de todo la defensa y estimulo del jugador nacional”. Sin embargo el nuevo nombre no aparecería en las planillas oficiales de la Dimayor sino hasta la temporada siguiente.[17]

La relación con Fabricato duró hasta noviembre de 1951 pues debido a los pobres resultados y la mala situación económica del equipo, la empresa decide ceder sus acciones a un grupo aficionados encabezados por el señor Miguel Mesa Acosta.[18]

En el campeonato de 1952 continúa la mala racha deportiva. Debido a la deficiente campaña, el técnico Ricardo ‘el tanque’ Ruiz es destituido, y en su lugar es nombrado el uruguayo José Saule. Al final del torneo, Nacional terminaría en la posición doce con 17 puntos, 29 menos que el campeón. Para destacar, aquel sería el último año que el elenco verdolaga hiciera las veces de local en el hipódromo San Fernando